Es como las matemáticas: se trata de magnitudes directamente proporcionales.Matemática sentimental.
A cuantas personas le gustarían estar rodeados de cientos, miles, millones de libros. A cuantas personas le gustarían sentarse en cualquier sitio, con un libro entre sus manos, y parar a leer, mientras otras vidas siguen su curso, y ellos están parados, sus segundos se escapan, pero de una forma provechosa, de una forma que ellos quieren.
El miedo de haber hecho algo mal.De llegar nueva a algún lugar.De que nadie te conozca y pienses que mejor así.Sabes que tienes que ganarte su confianza, aunque sepas que te volverás a ir, que no vas a estar siempre ahí.Tienes que enseñar.Es lo que quieres.Es lo que te gusta.
-Le echo de menos...¡Qué tonta estoy!
+No estás tonta...sólo enamorada.Enamorada de un chico estupendo, fantástico, gracioso y cariñoso.¿Qué más puedes pedir?Bueno, ya sé, que no te haga daño, porque esa sonrisa no se te puede borrar... Porque es lo que a ti te hace especial. Especial y espacial para él también.
Fíjate como se escapan nuestros recuerdos. Cómo se queman en el fuego abrasador.Cómo sólo quedan pequeñas cenizas en la que se reflejan la alegría, el amor, el dolor de una fructuosa amistad. Cenizas que se escapan al viento, que vuelan en busca de un lugar donde asentarse y buscar un lugar tranquilizador para revivir nuevos momentos.
La luz por primera vez penetraba por aquellos grandes y frondosos árboles. Aquel tupido bosque cada vez era más hermoso, por fin, él estaba allí, por fin.
Seis cuerdas, seis sentimientos, seis melodías, seis formas de vivir, seis formas de enamorar, seis meses, seis noches, seis citas, seis modelitos, seis besos, seis abrazos, seis te quiero y muchos más.

