23 de febrero de 2011

Parpadeos a escala grande.

Una luz, el Sol en lo alto del cielo. Casi las 12. Te ciega, te hace pasar calor, desperezarte disimuladamente, arremangarte el jersey azul marino hasta por encima del hombro. Echas una ojeada. Algunos se quejan de ella, otros sonríen y toman el sol tranquilamente, y algún que otro se levanta, echa fuerzas sobre esas viejas, grises y sucias persianas para cerrarlas, y quedarnos a oscuras. Si vieses tus ojos, verías como se aclaran, como del marrón verdoso del invierno, se transforman en el verde aceituna de la primavera. Y piensas que no puede haber cosa más bonita, la primavera llega.
Oscuridad.
Un sentimiento, en lo más hondo de tu corazón. Permanente. Te duele al recordar, no quieres ni pensar, se instala en tu cabeza y sólo existe ese sentimiento, que te destroza por dentro, y te hace perder esa sonrisa diaria. Pocos se dan cuenta, si acaso alguno que pasa te pregunta distraídamente qué te pasa, pero poco le importa y ni siquiera se para. Poquísimos te preguntan lo mismo y te miran con tristeza, pero casi ninguno, casi nunca, se para, te mira, te sonríe, te abraza. Nunca, nadie. Así que yo sigo con mi sentimiento en mi corazón, con mi cara de no saber qué decir ni qué hacer, con una respuesta para las preguntas distraídas y una pequeña y forzada sonrisa que arruga mi cara para los que se interesan un poco más. Y esperas, sentada, incómoda, que nadie sabe como comportarse cuando alguien se siente mal. Es más, nadie quiere involucrarse cuando estás mal.
Oscuridad.
Cariño, a esa persona. Obviamente, permanente. Por todo lo que te ha ayudado, recomendado, por las veces que te ha hecho sentir mejor, más buena persona, más madura, por los momentos mínimos que has pasado con ella, por las pocas veces que has llorado con ella, y por todos los problemas que te ha solucionado, las tonterías que has hecho por esa persona y viceversa. Una única persona, entre muchas diferentes, que en el fondo te hace sufrir más de lo que imaginas. Que te hace sentir mal, te decepciona, o te sonríe y te hace feliz. Será ley de vida. Las personas a las que quieres, te hacen feliz tan rápidamente como te decepcionan. Las quieres como tan pronto piensas que es mejor olvidarlas, que no merece la pena... Pero, en el fondo, prefieres sufrir, a perderla.
Oscuridad.
Te giras, dos locas lagartas tomando el sol. Miras a tu lado, una loca distraída fijándose en los tíos buenos que pasan, más allá, otras dos absortas en sus pensamientos. Locura, risas, momentos de lloro con la sonrisa más grande, que los demás os miren, os llamen locas y vosotras seguís riéndoos, sin importaros nada, sólo la fiesta, la diversión y vosotras mismas. Nada seríamos sin las amigas.
Oscuridad.
Luz.
Oscuridad.
Pequeños parpadeos. Similitudes con la vida. Tan pronto lloras como ríes. Estás feliz como triste. Un leve parpadeo. Cambiamos de estados de ánimo tan rápido como parpadeamos. La vida pasa tan rápido como lo que tardas en abrir y cerrar los ojos.

22 de febrero de 2011

Sigo sin encontrar la parte positiva de muchas cosas...

18 de febrero de 2011

Las personas más importantes para ti, son las que primero te decepcionan...

14 de febrero de 2011

Atentamente,

Gracias, muchas gracias. Una forma de emocionarse únicamente, gracias.

"Como profesora del Colegio Sagrado Corazón de Jesús, me es grato recomendarles a la alumna Claudia Pérez Mestre, al considerarla una candidata idónea para la selección.

Durante toda su trayectoria educativa, presenta un excelente expediente académico. Sus calificaciones son muy altas en todas las materias y su nota de inglés ha sido siempre de sobresaliente. Tiene un alto nivel en expresión oral y escrita y mucho interés por seguir aprendiendo.

Claudia es una chica responsable, con capacidad de escucha, con capacidad para administrar el tiempo, sabe mantener una conversación, con capacidad de esfuerzo personal, con capacidad para trabajar en equipo, motivada, luchadora, alegre, sencilla, cariñosa y se preocupa por ayudar a los demás.

Quiero agradecerles su atención y solicitarles, que si es posible, le concedan a Claudia participar en esta experiencia tan enriquecedora del campamento."

Llevo mucho tiempo sin tocar el blog, y esto para nada lo he escrito yo, pero estoy con la cabeza apunto de explotar y no me da para mucho ahora mismo... Estaré por aquí, invisible, leyéndoos, pero sin dejar mi huella, no tengo tiempo... Espero volver cuanto antes.
Hoy, os dejo la descripción mía que ha hecho una personita. Espero que os guste.
Besos bloggeros!